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Salon del Automovil Shanghai 2007
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Salon del Automovil Shanghai 2007
En la última edición del Salón del Automóvil de Shanghái (Auto Shanghái 2007), se pudo apreciar que el gigante asiático es una maquina arrolladora, con un formidable nivel de desarrollo y probabilidades de crecimiento que parece no tener límites.
Prueba de su dominio, tanto en la industria como de su mercado, la industria automotriz en China sigue progresando con viento a favor.
Para estar a nivel global de competencia con las compañías de Europa y americanas, las principales empresas fabricantes de automóviles de China.
Hoy en día priorizan la calidad sobre el precio, por este motivo, no miden esfuerzos ni recursos para ofrecer vehículos con una tecnología de avanzada y de protección del medio ambiente.
De esta manera, pretende transmitir el lema 'Tecnología y Naturaleza en armonía', lo que deja a la vista la preocupación de esta Nacion, una de las principales en el consumo de petróleo del mundo, por la preservación del medio ambiente.
Una prueba de todo esto, en la expo Auto Shanghái 2007 la gran mayoría de los expositores mostraron modelos híbridos y también impulsados por energías alternativas.
En total, más de treinta vehículos de este tipo de tecnología ecológica dijeron presente en un salón que nunca había mostrado esta cara tan ecológica.
En China el mercado automotriz está en un incesante desarrollo, con unos números de ventas que crecen en proporciones de “pelicula".
En hechos, 2006 se cerró con unas ventas de 7.500.000 unidades y en el 2007 se alcanzaron los 8.600.000 vehículos vendidos.
Para 2010 se prevé superar la barrera de los diez millones de unidades. Cifras que suenan muy tentadoras para las compañías del mundo y en especial para las europeas y americanos que, incentivados por la política económica exterior del Gobierno de China, establecen alianzas con los grupos más importantes de ese país.
General Motors (GM), la primera empresa automotriz que nacio en el mundo, tuvo la visión que el mercado automotriz chino era muy prometedor y ofrecía oportunidades muy interesantes.
Por ello no vacilaron -hace ahora más de doce años- en establecerse en China.
Un avance que, según Kevin Wale, presidente de GM en China, fue todo un éxito ya que para la compañía americana, el mercado automotriz chino se encuentra en segundo lugar como mejor mercado con un total de 900.000 vehículos vendidos en 2006, lo que les significo un 13,4% de cuota del total de las ventas en China.
Para conquistar una posición tan privilegiada, General Motors creo más sociedades comerciales con otros socios como:
SAIC (Shanghái Automotive Industry Corporation), que es una de las principales empresas automotrices chinas,
y Wuling Automotive, que ocupa uno de los primeros lugares en la producción de vehículos pequeños.
Por esto esta última marca es esencial en los planes de desarrollo futuro de la compañía americana.
Su planta está ubicada en la ciudad china de Liuzhou, a unos 100 kilómetros de la frontera con Vietnam, y los vehículos fabricados ahí son dos pequeños monoplazas con versiones 'pick-up' como el Wuling Sunshine Van, el Wuling Hongtu y el Chevrolet Spark (en Europa, Matiz).
Los bajos precios de estos modelos -se comercializan desde alrededor de 2.700 euros-permiten a GM ser líder en China en la sección de vehículos pequeños.
En 2006 se comercializaron más de 490.000 vehículos y su objetivo para el año 2007 fue superar el medio millón de ventas, lo que le permitió a la compañía automotriz americana acaparar cerca del 40% del mercado en este sector.
Tecnología de ultima generación
Uno de los pilares más fundamental de General Motors en el mercado automotriz chino es el PATAC (Pan Asian Technical Automotive Center), una 'joint venture' conformada por 50% entre GM y SAIC.
Ello consiste en un centro de ingeniería y de diseño que se encarga de crear nuevos proyectos y certificar y probar los diferentes componentes que se emplean en la fabricación de sus vehículos.
En este centro se trabaja con tecnología de última generación automotriz. Y la prueba de ello es la fabricación o mejor dicho la creación del Bock Riviera. Este vehículo es un concept car que su diseño fue inspirado en el Buick Riviera del siglo pasado.
Es una mezcla de un excelente gusto en el diseño y la utilización de materiales de ultima generacion aplicados a la industria automotriz.
Este prototipo procura demostrar la capacidad técnica y tecnológica que adquirió la industria China aplicándola a los automóviles.
Fue por todo esto que Rick Wagoner, máxima autoridad de General Motors -que asistió al Salón de Shanghái-,
afirmó que en el PATAC van a desarrollar futuros modelos de la compañía que más tarde se venderán tanto en Europa como en Estados Unidos.
En la última edición del Salón del Automóvil de Shanghái (Auto Shanghái 2007), se pudo apreciar que el gigante asiático es una maquina arrolladora, con un formidable nivel de desarrollo y probabilidades de crecimiento que parece no tener límites.
Prueba de su dominio, tanto en la industria como de su mercado, la industria automotriz en China sigue progresando con viento a favor.
Para estar a nivel global de competencia con las compañías de Europa y americanas, las principales empresas fabricantes de automóviles de China.
Hoy en día priorizan la calidad sobre el precio, por este motivo, no miden esfuerzos ni recursos para ofrecer vehículos con una tecnología de avanzada y de protección del medio ambiente.
De esta manera, pretende transmitir el lema 'Tecnología y Naturaleza en armonía', lo que deja a la vista la preocupación de esta Nacion, una de las principales en el consumo de petróleo del mundo, por la preservación del medio ambiente.
Una prueba de todo esto, en la expo Auto Shanghái 2007 la gran mayoría de los expositores mostraron modelos híbridos y también impulsados por energías alternativas.
En total, más de treinta vehículos de este tipo de tecnología ecológica dijeron presente en un salón que nunca había mostrado esta cara tan ecológica.
En China el mercado automotriz está en un incesante desarrollo, con unos números de ventas que crecen en proporciones de “pelicula".
En hechos, 2006 se cerró con unas ventas de 7.500.000 unidades y en el 2007 se alcanzaron los 8.600.000 vehículos vendidos.
Para 2010 se prevé superar la barrera de los diez millones de unidades. Cifras que suenan muy tentadoras para las compañías del mundo y en especial para las europeas y americanos que, incentivados por la política económica exterior del Gobierno de China, establecen alianzas con los grupos más importantes de ese país.
General Motors (GM), la primera empresa automotriz que nacio en el mundo, tuvo la visión que el mercado automotriz chino era muy prometedor y ofrecía oportunidades muy interesantes.
Por ello no vacilaron -hace ahora más de doce años- en establecerse en China.
Un avance que, según Kevin Wale, presidente de GM en China, fue todo un éxito ya que para la compañía americana, el mercado automotriz chino se encuentra en segundo lugar como mejor mercado con un total de 900.000 vehículos vendidos en 2006, lo que les significo un 13,4% de cuota del total de las ventas en China.
Para conquistar una posición tan privilegiada, General Motors creo más sociedades comerciales con otros socios como:
SAIC (Shanghái Automotive Industry Corporation), que es una de las principales empresas automotrices chinas,
y Wuling Automotive, que ocupa uno de los primeros lugares en la producción de vehículos pequeños.
Por esto esta última marca es esencial en los planes de desarrollo futuro de la compañía americana.
Su planta está ubicada en la ciudad china de Liuzhou, a unos 100 kilómetros de la frontera con Vietnam, y los vehículos fabricados ahí son dos pequeños monoplazas con versiones 'pick-up' como el Wuling Sunshine Van, el Wuling Hongtu y el Chevrolet Spark (en Europa, Matiz).
Los bajos precios de estos modelos -se comercializan desde alrededor de 2.700 euros-permiten a GM ser líder en China en la sección de vehículos pequeños.
En 2006 se comercializaron más de 490.000 vehículos y su objetivo para el año 2007 fue superar el medio millón de ventas, lo que le permitió a la compañía automotriz americana acaparar cerca del 40% del mercado en este sector.
Tecnología de ultima generación
Uno de los pilares más fundamental de General Motors en el mercado automotriz chino es el PATAC (Pan Asian Technical Automotive Center), una 'joint venture' conformada por 50% entre GM y SAIC.
Ello consiste en un centro de ingeniería y de diseño que se encarga de crear nuevos proyectos y certificar y probar los diferentes componentes que se emplean en la fabricación de sus vehículos.
En este centro se trabaja con tecnología de última generación automotriz. Y la prueba de ello es la fabricación o mejor dicho la creación del Bock Riviera. Este vehículo es un concept car que su diseño fue inspirado en el Buick Riviera del siglo pasado.
Es una mezcla de un excelente gusto en el diseño y la utilización de materiales de ultima generacion aplicados a la industria automotriz.
Este prototipo procura demostrar la capacidad técnica y tecnológica que adquirió la industria China aplicándola a los automóviles.
Fue por todo esto que Rick Wagoner, máxima autoridad de General Motors -que asistió al Salón de Shanghái-,
afirmó que en el PATAC van a desarrollar futuros modelos de la compañía que más tarde se venderán tanto en Europa como en Estados Unidos.
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